En los meses de más frío es importante contar con un sistema de calefacción adecuado que nos mantenga cálidos pero que no consuma demasiada energía, un equilibrio que no siempre es fácil de obtener.
Ya sea que estés planeando instalar un sistema de calefacción en tu casa o quieras comprar un aparato portátil, te damos algunas útiles recomendaciones para que descubras cómo elegir una calefacción para invierno.?Existen varios tipos de calefacción, sin embargo la elección dependerá en gran medida de tus necesidades junto con factores como el clima de la zona donde vives, la disposición de las habitaciones, el aislamiento contra el frío que existe dentro de la casa etc. El primer paso es conocer las alternativas disponibles y descubrir sus propiedades.
Calefacciones eléctricas: son una buena alternativa para personas que viven en zonas en las que las temperaturas no son tan bajas. A pesar de que su uso implica un incremento importante en la cuenta de la electricidad es una alternativa respecto a seguridad. Sin embargo es adecuada también para las familias que no pasan demasiado tiempo dentro de la casa, pues tenerla todo el día encendida representa un gasto importante.
Calefacciones de gas natural: es una de las alternativas más usadas en hogares en los que existen instalaciones de gas, pero también resulta una opción viable y económica cuando se trata de estufas. Cuenta con un mantenimiento fácil y su uso no representa un incremento tan elevado de presupuesto. Es genial tanto para climas muy fríos como para aquellos más templados.
Aire acondicionado: la alternativa ideal para los que buscan gastar poco tanto en instalación como en mantenimiento. Un aire acondicionado es perfecto para esos lugares en los que el calor se requiere en puntos específicos, por ejemplo en la habitación principal o living, además son útiles también para el verano debido a la opción de aire fresco acondicionado.
No importa el tipo de calefacción que elijas, lo verdaderamente importante es recordar que una de las formas de optimizar su funcionamiento y hacer que el calor se mantenga en casa por más tiempo, es asegurarte de que tu hogar está bien aislado contra el frío. De este modo no será necesario mantener la calefacción encendida por demasiado tiempo, lo que se traducirá en un seguro ahorro en tus cuentas de fin de mes.